Hola,
Coco es el primer perro que tengo yo sola, e ilusa de mí, tras ilustrarme mucho por internet, pensé que podría adiestrarlo. Al cabo del tiempo, me di cuenta que era misión imposible porque no tenía ni los conocimientos ni las técnicas oportunas para ello, por lo que entendí que necesitaría ayuda de adiestradores profesionales.
Movida por el hartazgo de no conseguir nada por mí misma, en la primera clase le pregunté a Bea si le podía dejar un tiempo el perro y que me lo devolviera adiestrado, respondiéndome que sí pero que no era conveniente porque el perro no iba a crear el vínculo conmigo y sería complicado que yo me convirtiera en su referencia. Así que me embarqué en esta aventura de aprender a adiestrar al perro con la ayuda de Bea.
Si no llega a ser por lo que me está enseñando, no sé que hubiera hecho con él. Gracias a ella, estoy aprendiendo poco a poco a entenderle, psicología perruna, que dice Bea, y voy consiguiendo que cada vez sea más obediente, sin dejar de ser perro, y así poder disfrutar más de él y con él. Pero esto se obtiene con mucho trabajo detrás, entrenando todos los días las pautas que indica Bea, las cuales razona desde el punto de vista del comportamiento de los perros y extrapolándolas también al comportamiento humano.
Así pues, entrenando mucho, acabas conociendo a tu perro y preveyendo algunas de sus conductas, lo que te permitirá modificarlas si no son adecuadas.
Bea, gracias por tomarte tan en serio tu trabajo y por ayudarnos.
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